En entrevista para 1 Rock Show, Maynard James Keenan recomendó ‘Ese track’, del álbum 10,000 Days, como el punto de partida para conocer el mundo de Tool.

Texto por:   @AvanzadaMx  | Fecha: 12/01/2025

Hay bandas que son más intimidantes para explorar que otras, y Tool es, sin duda, una de ellas. Desde fuera, la mística que rodea a esta banda estadounidense puede parecer indescifrable. Con apenas cinco álbumes publicados en sus 35 años de trayectoria, Tool cuenta con un catálogo reducido para una agrupación de su calibre. Sin embargo, lo que les falta en cantidad lo compensan con una calidad incomparable y una base de seguidores que se asemeja más a un culto que a una simple audiencia. Esta fanaticada, tan apasionada como peculiar, ha sido clave para consolidar el estatus casi mítico de la banda dentro del rock progresivo.

 

El fenómeno Tool se basa en varios pilares. Entre ellos están sus ritmos complejos, las letras filosóficamente profundas de Maynard James Keenan, y la incesante búsqueda musical que los ha llevado a empujar los límites del género como pocas bandas lo han hecho. Desde incorporar la secuencia de Fibonacci en la estructura de una canción hasta experimentar con instrumentos creados por ellos mismos, como el innovador “pipe bomb microphone” (un micrófono artesanal que fusiona un pickup de guitarra con un cilindro de latón), Tool es sinónimo de perfección y audacia creativa.

 

 

UN VÍNCULO DE AMOR Y RECHAZO CON SU FANDOM

A pesar del amor incondicional de sus seguidores, la relación entre Tool y su base de fans es, por decir lo menos, complicada. Maynard James Keenan ha sido franco sobre su frustración con ciertos miembros del público, llegando a calificarlos de “insoportables”. Según el vocalista, muchos fans se obsesionan más con el “lore” que envuelve a la banda que con la música misma, lo que ha llevado a situaciones extremas, como amenazas de muerte motivadas por la espera prolongada entre álbumes. Esta intensidad, aunque problemática, es también un testimonio de la profunda conexión que los seguidores sienten con la banda.

 

El tiempo entre lanzamientos ha sido uno de los sellos distintivos de Tool. Cada álbum parece ser el resultado de una búsqueda artística exhaustiva, lo que explica los extensos periodos de espera. Este enfoque, aunque desafiante para los fanáticos impacientes, ha contribuido a la leyenda de la banda, posicionándolos como un grupo que prioriza la calidad sobre la cantidad y el impacto duradero sobre la gratificación instantánea.

 

EL DILEMA DE POR DÓNDE EMPEZAR

Explorar el universo musical de Tool no es tarea sencilla, especialmente para quienes se acercan a la banda por primera vez. Su discografía, aunque limitada, es rica en complejidad y está cargada de significados que trascienden lo meramente musical. Esto plantea un dilema: comenzar de manera cronológica podría no captar la profundidad de su evolución, mientras que adentrarse directamente en sus trabajos más recientes podría desvirtuar la esencia de su trayectoria artística.

 

Consciente de esta dificultad, el propio Keenan ha ofrecido una guía para los nuevos oyentes. Durante una entrevista en el programa BBC Radio 1 Rock Show con Daniel P Carter en 2021, el vocalista señaló que ‘The Pot’, sencillo del álbum 10,000 Days (2006), es el punto de partida ideal para quienes desean adentrarse en el mundo de Tool. Para Keenan, este tema encapsula perfectamente la energía cruda de sus primeros años junto con la madurez refinada que alcanzarían en su etapa más reciente.

 

‘THE POT’: UN PUNTO DE ENTRADA AL UNIVERSO TOOL

‘The Pot’ es una demostración brillante de cómo Tool logra fusionar las influencias individuales de sus miembros en un todo cohesivo. Keenan explicó que la banda se esfuerza hasta el agotamiento para garantizar que cada integrante brille en sus composiciones, y esta canción es una prueba clara de ese compromiso. Según él, el tema logra un equilibrio entre esfuerzo consciente y frescura, convirtiéndose en un ejemplo de su capacidad para innovar sin perder su esencia.

 

“Creo que esta es una de esas canciones que, aunque no fue creada de forma ‘esfuerzo cero’, tiene un aire de frescura y fluidez consciente. Si vas a presentar nuestra banda a alguien, no deberías empezar con una canción de 27 minutos. Cálmate. No te pongas todo QAnon con nosotros”, comentó Keenan con su característico humor sarcástico.

Añadió: “Concéntrate en ‘The Pot’. Esa será la introducción perfecta a todas las posibilidades que este proyecto ofrece”.

 

MÁS ALLÁ DE LA MÚSICA

Tool no es simplemente una banda; es un fenómeno cultural que trasciende el ámbito musical. Su enfoque innovador, tanto en términos de composición como de producción, los ha convertido en pioneros del rock progresivo moderno. Pero más allá de sus logros técnicos y artísticos, lo que realmente los define es su capacidad para inspirar una devoción casi religiosa en sus fans.

 

Cada álbum, cada canción y cada detalle detrás de su proceso creativo están cargados de simbolismo, lo que hace que la experiencia de escuchar a Tool sea tan intelectual como emocional. Desde los intrincados patrones rítmicos de Danny Carey hasta las líneas de bajo hipnóticas de Justin Chancellor y los riffs etéreos de Adam Jones, cada miembro aporta una pieza esencial al rompecabezas que es Tool.

 

LA RELEVANCIA ETERNA DE TOOL

A medida que pasan los años, Tool sigue siendo una fuerza indomable en la música. Su capacidad para reinventarse y mantenerse fieles a su visión artística los ha consolidado como una banda única en su género. Para quienes aún no se han sumergido en su mundo, ‘The Pot’ es una puerta de entrada ideal. Pero, como cualquier fanático te dirá, una vez que entres, no habrá vuelta atrás. En el universo de Tool, cada capa de significado conduce a otra, y la exploración se convierte en un viaje interminable.

 

Así que, si aún no los conoces, Tool no es solo una banda para escuchar; es una experiencia para vivir y un enigma para descifrar. Como ellos mismos demuestran, en el rock progresivo no hay límites, solo posibilidades infinitas.