La empresa emitió una orden de cese y desistimiento, acusando a 16 Creative de infringir sus marcas registradas, específicamente al diseño del cuerpo de la Les Paul.
Texto por: @AvanzadaMx | Fecha: 27/11/2024
El mundo de la música y la política se encuentra en medio de una peculiar batalla legal que ha captado la atención de la industria y del público en general. La controversia gira en torno a las Trump Guitars, una línea de instrumentos respaldada por el presidente electo Donald Trump y fabricada por la empresa 16 Creative. Desde su anuncio, esta colección de guitarras acústicas y eléctricas ha generado polémica, no solo por sus elevados precios, que van desde los $1,000 hasta más de $11,500 para las versiones firmadas por Trump, sino también por su notable similitud con el icónico diseño de la Les Paul de Gibson.
La línea de guitarras, anunciada en la plataforma Truth Social de Trump, se divide en varias series, como American Eagle, Presidential y God Bless the USA. Las Trump Guitars, promocionadas como “las únicas guitarras oficialmente respaldadas por Donald J. Trump”, cuentan con elementos distintivos como el lema Make America Great Again incrustado en perlas auténticas y el número “45” en referencia al lugar de Trump como el 45.º presidente de Estados Unidos. Trump mismo ha impulsado la promoción, apareciendo en imágenes en su plataforma Truth Social sosteniendo uno de estos modelos, consolidando la conexión entre su figura política y estos productos.
Sin embargo, Gibson, conocida por proteger agresivamente su propiedad intelectual, no tardó en reaccionar. La empresa emitió una orden de cese y desistimiento, acusando a 16 Creative de infringir sus marcas registradas, específicamente en lo que respecta al diseño del cuerpo de la Les Paul. “El diseño es una violación directa de nuestras marcas registradas exclusivas”, declararon representantes de Gibson. Este caso no es aislado, ya que Gibson mantiene enfrentamientos legales con otras marcas como Dean Guitars por problemas similares.
La disputa no solo plantea cuestiones legales, sino también éticas y políticas. A lo largo de los años, Trump ha diversificado su nombre en múltiples productos, desde vodka hasta NFT, pero las guitarras añaden un nivel adicional de escrutinio. Algunos expertos sugieren que esta empresa podría violar la cláusula de emolumentos de la Constitución de EE.UU., que prohíbe que los presidentes tengan intereses comerciales que puedan generar conflictos de interés. La decisión de Trump de no desvincularse de sus negocios durante su mandato anterior ya había generado controversias similares.
A pesar de la orden legal, las Trump Guitars siguen disponibles para pedidos en su sitio web, lo que podría intensificar el enfrentamiento legal. Además, hay dudas sobre el verdadero origen “Made in USA” de estos instrumentos, ya que se fabrican con componentes de proveedores nacionales e internacionales.
Esta peculiar disputa destaca no solo por su relevancia legal, sino también por la compleja intersección entre cultura pop, negocios y política. Mientras Gibson defiende su legado y los intereses comerciales de Trump enfrentan un nuevo escrutinio, queda por ver si esta controversia marcará un precedente en la relación entre la política y la industria musical. ¿Será este el último capítulo de una batalla tan polarizante como el propio Trump? El tiempo lo dirá, pero por ahora, los riffs de guitarra parecen estar desafinando con un tono político inesperado.