Su carrera cinematográfica ha estado salpicada de una atmósfera gótica que lo ha convertido en el favorito de Tim Burton.
Texto por: @AvanzadaMx | Fecha: 21/08/2024
Johnny Depp, el rebelde del cine, siempre ha sido una figura atípica en Hollywood. A lo largo de su carrera, ha demostrado ser mucho más que un simple actor, impregnando cada uno de sus proyectos con un espíritu rockero que parece desafiar las normas del estrellato tradicional. Aunque hoy en día su imagen ha cambiado, hubo un tiempo en el que Depp era el epítome de la frescura, un hombre que, más que un actor, se sentía músico en cada fibra de su ser.
Antes de conquistar la gran pantalla, Depp soñaba con la música. Como guitarrista apasionado, se codeó con leyendas del rock como Iggy Pop, Oasis y Jeff Beck, llevándose de ellos no solo una amistad, sino una influencia que permeó cada uno de sus movimientos en Hollywood. Su amor por la música era tan grande que lo llevó a colaborar en la banda sonora de películas como “Chocolat” y “Once Upon a Time in Mexico”, y a protagonizar videos musicales de íconos como Tom Petty y Paul McCartney.
En la década de los noventa, Depp formó parte de P, un supergrupo que reunió a lo mejor de la escena alternativa con nombres como Gibby Haynes de Butthole Surfers, Flea de Red Hot Chili Peppers, y Steve Jones de Sex Pistols. Sin embargo, la trágica muerte de River Phoenix, amigo cercano de Depp, frente al club The Viper Room, del cual era copropietario, marcó el fin de esta prometedora banda.
Pero la música no es el único rincón oscuro que Johnny Depp ha explorado. Su carrera cinematográfica ha estado salpicada de una atmósfera gótica que lo ha convertido en el favorito de Tim Burton. Desde el inolvidable Edward Scissorhands hasta películas como “Sleepy Hollow” y “Sweeney Todd”, Depp ha demostrado que lo macabro es su zona de confort, incluso en las adaptaciones más fantasiosas como “Alice in Wonderland” y “Charlie and the Chocolate Factory”.
El vínculo de Depp con el horror va más allá de la pantalla. Su amor por el género se refleja en sus influencias cinematográficas, con clásicos como “Dracula” de Tod Browning y las películas de terror de Hammer como sus favoritas. Este aprecio por el cine oscuro se filtra en cada uno de sus papeles, otorgándole una profundidad que pocos actores pueden igualar.
Johnny Depp no es solo un actor que juega a ser estrella de rock. Es una figura compleja que ha vivido y respirado el espíritu del rock ‘n’ roll, tanto en la música como en el cine. Aunque su carrera ha tenido altibajos, su legado como el chico malo de Hollywood con un corazón gótico permanece intacto, recordándonos que, en el fondo, sigue siendo un músico que actúa.